El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, es una fecha para reconocer la lucha de las mujeres por la igualdad, la justicia y sus derechos en todos los ámbitos de la sociedad. Desde la Asociación de Pacientes Cardíacos, queremos sumarnos a esta conmemoración destacando un aspecto esencial: la salud cardiovascular femenina, un tema de gran importancia que muchas veces no recibe la atención que merece.
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en mujeres en todo el mundo. Sin embargo, en muchas ocasiones, el riesgo se subestima y los síntomas pueden pasar desapercibidos o confundirse con otras afecciones. Esto se debe, en parte, a que durante años la investigación médica ha centrado sus estudios en el sistema cardiovascular masculino, dejando en segundo plano las particularidades del corazón de la mujer.
Cuidar el corazón también es un acto de amor propio
Es fundamental que todas las mujeres sean conscientes de la importancia de cuidar su salud cardiovascular y de prestar atención a los signos de alerta que pueden indicar un problema en el corazón. Los síntomas de un infarto en mujeres pueden ser diferentes a los de los hombres. Mientras que en los hombres el dolor en el pecho es el signo más habitual, en las mujeres pueden presentarse otros síntomas menos evidentes, como:
- Dolor en el cuello, mandíbula, espalda o estómago.
- Fatiga extrema y sensación de agotamiento sin razón aparente.
- Mareo, náuseas o vómitos.
- Dificultad para respirar.
Muchas veces, estas señales no se asocian con un problema cardíaco y, por ello, el diagnóstico se retrasa, con consecuencias que pueden ser graves.
Factores de riesgo que no deben pasarse por alto
El estrés, la hipertensión y la diabetes son algunos de los factores que aumentan el riesgo de enfermedades cardiovasculares en las mujeres. Además, existen otros elementos específicos que pueden influir en su salud cardíaca, como los cambios hormonales a lo largo de la vida, el embarazo o la menopausia.
En la actualidad, muchas mujeres llevan un ritmo de vida acelerado y asumen múltiples responsabilidades en el trabajo, en el hogar y en el cuidado de sus familias. Esto puede llevarlas a descuidar su propia salud, postergando controles médicos y hábitos saludables que son fundamentales para prevenir enfermedades del corazón.
Prevenir es clave para una mejor salud cardiovascular
Cuidar el corazón es un compromiso de por vida. Para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, es importante adoptar hábitos saludables como:
- Mantener una alimentación equilibrada, rica en frutas, verduras, legumbres y grasas saludables como el aceite de oliva.
- Realizar ejercicio físico de manera regular, adaptado a las posibilidades de cada persona.
- Controlar la presión arterial, el colesterol y los niveles de azúcar en sangre.
- Evitar el tabaco y reducir el consumo de alcohol.
- Acudir a revisiones médicas periódicas, especialmente si existen antecedentes familiares de enfermedades del corazón.
Cuidar de una misma para cuidar de los demás
Desde la Asociación de Pacientes Cardíacos, queremos recordar a todas las mujeres que su salud es una prioridad. Escuchar el cuerpo, acudir a revisiones médicas y adoptar hábitos saludables no solo les permitirá disfrutar de una mejor calidad de vida, sino que también les ayudará a seguir cumpliendo sus sueños y apoyando a quienes las rodean.
En este Día Internacional de la Mujer, queremos rendir homenaje a la fuerza, la dedicación y el compromiso de todas las mujeres. Cuidarse es también un acto de amor propio.
Feliz 8 de marzo.
